Wendy's Summer Mission Update!

The situation we are experiencing has impacted me a lot. Every day, there are more people infected with COVID. However, despite the crisis that we are going through, God is working in the church and in the ministry. We have tried to continue working, and we have tried to help and show a lot of faith to help motivate people. It has been quite difficult to change the way we do ministry, but with God's help, we are gradually adapting.


Many of  the families are in great need, and we also have the challenge with the teens of Project Valor. We need to help them a little more, and we need to find the best way to support them so that they can continue with their studies at home. It makes me a little sad not to see the teens, but I know they are well with their families.


It is very sad to see the elderly at the nursing home alone. They await our visit every Tuesday, but it is impossible for us to be with them since we must make sure that they do not get infected. It is painful to know that they are waiting for us, but we cannot come in and greet them with a hug or a handshake and ask how they are, listen to them sing, watch them eat their fruit and know that they are fine by seeing them face to face.


I thank God that we can do this ministry. For me, it is a very great privilege to be able to share God's love with people and also to bring the message of God's word to children, even though I cannot see them now.


I know that God will have mercy on each one of us and heal our earth and his creation. This is the confidence that I have in these difficult times that we are going through.

En Español:

​
Me impacta mucho la situación que estamos viviendo y que cada día hay más personas infectadas, pero a pesar de la crisis que estamos pasando Dios esta obrando en la iglesia y como ministerio hemos tratado de seguir activando y hemos tratado de ayudar y mostrar mucha fe para motivar a las personas. Ha sido bastante difícil cambiar nuestra forma de hacer el ministerio, pero con la ayuda de Dios poco a poco estamos adaptándonos.


Hay mucha necesidad en las familias, pero también tenemos el reto con los chicos del proyecto valor, necesitamos ayudar un poco más, pero tenemos que buscar la forma correcta de hacerlo y no afectar sus estudios y que sigan estudiando en sus casas sin que se descuiden de hacer sus tareas. Me pone un poquito triste no ver a los chicos, pero sé que están bien con sus familias.


Los ancianos del asilo es muy triste ver que están solos, ellos esperan nuestra visita cada martes, pero es imposible poder estar con ellos en estos momentos ya que debemos cuidar de que no se contagien, aunque es doloroso saber que nos esperan, pero no podemos entrar y saludarles con un abrazo o un saludo de manos y preguntar como están, escucharlos cantar, verlos comer su fruta y saber que ellos están bien al verlos cara a cara.


Gracias a Dios porque podemos hacer este ministerio para mi es un privilegio muy grande el poder compartir del amor de Dios con las personas y también el llevar el mensaje de la palabra de Dios a los niños, aunque ahora no les pueda ver.


Se que Dios tendrá misericordia de cada uno de nosotros y sanara nuestra tierra y a su creación es la confianza que tengo en estos momentos difíciles que estamos pasando.